COCÓ, FELICES 18

Un pilar en mi vida, una luz que alumbra mi camino, una princesa dentro de mi cuento y es ella la que se hace mayor hoy.

Hoy, con mas énfasis que nunca, echo un vistazo atrás y me encuentro de todo...

Hace 5 años fue la primera vez que te felicité, cuando cumplías 13. No sé cuales fueron las casualidades que hicieron que te conociera, pero estoy agradecida a todas ellas. Recuerdo segundo como un año de auténticas risas y del único año que tuvimos un enfado! Tercero fue el año de vacilar, claramente, y de cebarnos con el pobre Miguel... aunque en el fondo lo queríamos. En cuarto tuvimos la suerte de ir a Irlanda y la mala suerte de empezar a suspender!! En ese año empezamos a cambiar, tú a ser menos borde, yo a ser menos agresiva. Bachiller ha sido duro, realmente nos ha costado sacar el puto título, pero eh! aquí estamos, con nuestro bachiller y universitarias.

Durante estos cinco años nos han acompañado todo tipo de animales!! Desde perros, patos, chinchillas, unicornios, cerdos, tigres y siempre han tenido algún tipo de problema, o estaban a la mitad o necesitan ruedas, o cuentan chistes malos.

Hemos vivido de todo, y ahora esto más que nunca hay que celebrarlo, que eres de las chiquitinas, pero también ha llegado tu momento.

Gracias por ser tan tú, por estar deseando oir tus palabras con diminutivos, tu risa, tu bordería a ratos, tu quejarte por todo, tú, tú misma eres genial. Espero que hayas disfrutado mucho de este día, porque te lo mereces y que estoy deseando verte pequeña, te echo mucho de menos.

FELICES 18 COCO, COTI, COCOTI  MARIAJO, MARICOTI O COMO QUIERAS. MUCHISISISIMAS FELICIDADES, TE QUIERO MUCHO!!!

Frente a la tristeza.

Ponte frente a la tristeza,

mírala cara a cara.

Fija tus ojos en los suyos,

y descubre lo que hay en ellos.

¿Lo ves?

Es desolación, desesperanza,

desilusión.

Es miseria, penurias,

pobreza.

Es esclavitud, enfermedad,

contaminación.

Vivimos cada día,

sin pensar lo que tenemos alrededor;

y una vez que nos fijamos,

lo observamos,

nos alarmamos

y volvemos a vivir…

como lo hacíamos antes.

Somos hipócritas y altivos

y animales sin apenas corazón.

Somos interesados y egoístas.

Hasta que no los tenemos cerca,

los problemas no son un problema.

Hasta que no nos afecta,

los problemas son una leyenda...

de la que se conoce la historia,

pero nadie la cree. 

Nuestro final.

No soy consciente

de lo que supone perderte,

pero nunca nos acostumbramos

a dejar el orgullo de lado.

Cometimos errores,

y ninguno se arrepintió,

que va a pasar ahora…

Ahora que estamos más lejos que nunca,

ahora que no podemos ni hablar,

ahora sin decir nada,

poco podemos arreglar.

Nunca cerraré la ventana,

ni la puerta del portal,

todo dejaré abierto,

para el día que tú quieras entrar.

No olvides lo que fuimos,

vivimos y tenemos,

si no lo olvidas,

seguirá ocurriendo.

Nunca saldrás de mi cabeza,

y en mi corazón siempre estarás,

no eres para mi una persona cualquiera,

no eres una más;

para mi…

para mi tú siempre serás especial.