domingo, 22 de septiembre de 2013

Futuro...

Noche tras noche,
te preguntas que pasará,
cual será el próximo paso,
la siguiente jugada.

Lo piensas con calma,
pero no consigues descifrar nada,
porque nada está claro,
porque todo es demasiado oscuro.

Quizás estés aquí o allí,
lejos o cerca,
quieras o no,
la vida da muchas vueltas,
y tu noria no parece querer parar.

El cambio se acerca despacio,
acechando, esperando el momento perfecto,
para atacar,
para desviarte del camino normal,
y tomar otro.

Puede ser un atajo,
o puede ser un trayecto más largo,
pero si el destino lo quiere así,
tendremos que afrontarlo,
asumiendo que es lo que nos toca.

lunes, 9 de septiembre de 2013

Besos, caricias... shh, secretos.

Deslizate suave, despacio y con calma,
alrededor de mi cama.

Besa cada rincón de mi cuerpo,
sin pudor,
aprovecha que no es un cuento.

Disfruta como tú solo sabes,
hazme disfrutar como yo solo sé.

No te pido nada extraño,
a lo clásico si quieres,
pero aparta la almohada a un lado,
y deja que el colchon seamos los dos.

Uno encima del otro,
el otro encima del uno,
que mas da,
ven aquí conmigo,
sin pensar en nada más.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Helen.

Muy difícil odiarla,
demasiado fácil quererla.

Ella,
con sus idas y venidas
con sus locuras,
sus risas,
sus lágrimas.

Sencilla,
haciendo reír a los demás,
demostrándonos que la felicidad no es solo un estado de ánimo,
es una forma de vivir la vida.

Con sus vaciladas,
sus chistes,
su marujeo.

Siempre sabe qué decirte,
para no borrarte la sonrisa de la cara.
Sabe apoyarte cuando tiene que hacerlo,
y reñirte cuando lo estás haciendo mal.

Es única,
porque nunca vas a encontrar a nadie como ella,
porque solo ella sabe ser así.

Gracias por dejarme compartir tantos años de mi vida contigo,
para mi será un auténtico placer seguir haciéndolo.

Nunca olvides que esté donde esté,
siempre me vas a tener a tu lado.

Disfruta de este día tan especial,
porque te lo mereces,
porque si alguien sabe reírse de la vida,
esa eres tú,
y si alguien nos ha enseñado a ser felices,
solo has podido ser tú.

Felices 18 princesa, te quiero mucho!

lunes, 2 de septiembre de 2013

Amor, amor, amor.

Si es verdad que el amor existe,
¿porqué nos empeñamos en destruirlo?

Cada día nos esforzamos por encontrar a una persona,
una persona que mas allá de caricias y besos,
nos de confianza, seguridad,
cariño, sinceridad,
lealtad y compromiso.
Esa persona que nos acompañe en el camino,
pero sobre todo,
que nos ayude a construirlo;

y sin embargo,
una vez que la tenemos,
no sabemos cuidarla.

No sabemos apreciar lo que la otra persona hace por nosotros,
superamos nuestros propios límites,
por gente que no nos valora ni la mitad de lo que somos.

¿Y todo esto porqué?
Una especie de pacto entre tu cabeza y tu corazón,
que no te deja ser feliz por haberte equivocado de opción,
una sensación de querer y no poder,
porque pensaste que nada cambia,
que todo sería como el primer día.

Y ahora que todo cambió,
no eres capaz de afrontarlo,
de empezar de cero
y seguir buscando algo más lejos del amor,
tu bienestar y tu propia felicidad.

Ojalá todo en la vida fuera más fácil,
que siempre sumaramos dos más dos y nos diera cuatro,
que hubiera más grises entre el blanco y el negro,
que cuando eligieramos cara,
pudieramos cambiar a cruz.

Pero el amor no entiende de nada,
y a la vez lo entiende todo,
destruimos lo que nos llena,
para seguir sintiéndonos vacíos.